martes, 27 de diciembre de 2011

Argentinos por el mundo IV: Ricardo Machuca


Ricardo Machuca hizo sus inferiores Atlanta e Independiente, pero no tuvo la suerte de debutar en ninguno de esos dos. Así, buscando un lugar entre los más grandes se fue a General Paz Junior, donde jugó en la temporada 01-02.

Pero esta sección se llama “Argentinos por el Mundo” y hasta ahora hablamos sólo de clubes nacionales, así que cambiemos de tema.

Aunque pasó por Centroamérica (Universidad, de Honduras, también Aurora y Sanarate de Guatemala), no es ese país sobre que vamos a hablar hoy. Ricardo tiene pasos en países dos muy particulares: Vietnam e Indonesia. Sobre esas experiencias le va a hablar a “Por Europa no se consigue”

En la actualidad esta libre y recuperando de una lesión mientras jugaba en el Trinidense de Paraguay, que lo alejó varios meses de la cancha.
  

¿Te costó mucho irte a jugar a Asia?
Si. El idioma, las comidas, la manera de vivir de ellos te ayuda a ver las cosas de otra manera. Cuando estaba en Vietnam tenía traductor, pero cuando me fui a Indonesia aprendí el idioma enseguida. Te terminas acostumbrando: tenes internet, teléfono… Pero es muy difícil estar lejos: El tiempo perdido no se recupera más. Se extraña mucho a la familia, los amigos y las costumbres.

¿Cómo es la convivencia en Indonesia o Vietnam?

Y…no. Acá mal que mal tenes las mismas costumbres que tus compañeros. Afuera hay un poco más de distancia. También el tipo de juego tiene sus complicaciones.  Las canchas donde jugas, tus compañeros, la comunicación con ellos. Vos te contagias de como juegan, en el lugar donde estas. Un poco de todo.

¿Te aburrías mucho allá? 
No, yo entraba a internet y salía a comer generalmente. También salía a pasear con gente latina cada vez que se podía.
 
¿Hay algún clásico en alguno de los equipos en los que jugaste en Asia?

Si, tenía. La gente en Asia es muy pasional, pero vive todo como una fiesta. No existe la violencia allá. Por ejemplo, en Vietnam (Ahí jugo en el Hoa Phat Hanoi), no vi mucho sobre la guerra. Aunque si hay cosas históricas donde atacaron los yanquis. Ellos no estaban muy preparados, pero se defendieron como pudieron, como haríamos nosotros si nos atacaran hoy.

¿Pero no te pasó nada que tenga que ver con la inseguridad?

Si, inseguridad hay siempre. Una vez me robaron U$S2000 de mi casa y a la semana me entraron a robar de nuevo. La segunda vez lo vi y lo empecé a correr. No lo agarre por un segundo. Después llamé a la policía que me dijo que no toque nada, que iban a tomar huellas. No aparecieron nunca más jajaja.

Ricardo es el que tiene la número 7. Y uno de los pocos que esta de frente

martes, 20 de diciembre de 2011

Refuerzos Con Historia XIII: Julio Cesar Dely Valdez


Intentando entrar en un fútbol más competitivo, Julio Cesar Dely Valdez quería dejar su Panamá natal en busca de nuevos horizontes. Por aquel entonces, aunque sólo tenía 18 años ya había debutado en el Atlético Colon de su país. Su hermano Armando (del que ya hablaremos en otro post) le consiguió una prueba en Argentinos Jrs. Sin dudarlo emprendió viaje para Argentina.

En La Paternal lo sumaron a las inferiores del club, pero cuando llegó el día de hacerle su primer contrato decidieron que no había lugar para el. El club se había reforzado bien y entre los delanteros incorporados se encontraba Oscar Dertycia. Si lugar en el primer equipo y con casi 21 años, Julio Cesar debía buscarse un club si quería seguir en el fútbol.
 Fuente de la Foto: http://blog.teacordasbicho.com.ar/

El mercado de pases estaba cerrado para el futbol grande y el único lugar donde podía refugiarse era la Primera D. Así, llega Dely Valdez a Deportivo Paraguayo. El equipo de la comunidad paraguaya nunca había sido un referente de la categoría ni había estado entre los primeros de la categoría. De hecho, ni siquiera tenia cancha propia.

El panameño sorprendió en la división más chica del fútbol argentino. La temporada 87-88 fue la del debut de Dely Valdez, eso pero no le pesó. Termino el año con 27 tantos, segundo en la tabla de goleadores. Paraguayo terminó tercero y clasificó al octogonal para por el segundo ascenso (el otro era para el campeón que fue Midland). De forma sorpresiva, perdió ante Villa San Carlos que había terminado 8°.

Después de ese gran año del debut, el equipo “guaraní” se las arregló para retenerlo y el panameño no falló. Volvió a ser segundo en la tabla de goleadores con 26 dianas, pero el Deportivo terminó atrás de Liniers y tuvo que volver a jugar el octogonal por el otro ascenso. Esta vez no se quedó afuera en primera ronda como el año anterior, pero perdió la final con Argentino de Merlo. Ese fue todo el periplo argentino de Julio Cesar Dely Valdez.

El presidente de Nacional de Montevideo, Roberto Recalt, era lector de la revista argentina “Sólo Futbol” la única con cobertura en la D de todos los partidos. Ahí le llamo la atención la cantidad de goles convertidos por el jugador de Panamá. Viajó para Argentina, y le ofreció una prueba en “El Bolso”. En Uruguay se ganó el corazón de los hinchas metiendo más de 100 goles y saliendo campeón en el año 1992.

Su pasó por el fútbol charrúa le abrió las puertas al Viejo Continente donde vistió  las camisetas del Cagliari, Paris Saint Germain, Oviedo y Málaga (donde es el máximo goleador del club en Primera División).

Para el 2003, no pudo renovar su contrato con el equipo malagueño y volvió a Nacional. En el equipo uruguayo se dio el gusto de compartir algunos partidos con su hermano Jorge. Pero su nivel no era el mismo y la hinchada no le tuvo mucha paciencia. En el 2004 se fue para Árabe Unido de Panamá donde jugó hasta el 2007. Se retiró con casi 40 años.


martes, 13 de diciembre de 2011

Argentinos por el Mundo III: Hernan Carballo en Guadalupe

No existe jugador argentino que escape al sueño de vestir la camiseta de la selección o levantar la Copa del Mundo. No es un objetivo fácil y la velocidad del fútbol actual lleva a buscar soluciones rápidas para un crecimiento veloz. En pos de ese desarrollo profesional llegó Hernán Carballo a jugar en Guadalupe, una pequeña isla del Caribe.

El Tanque no quería renunciar a su sueño de vivir del fútbol, pero con veinte años ya se sentía sin posibilidades de meterse en las primeras planas de Argentina. Sin bajar los brazos, Hernán empezó a romper redes en la Liga Regional de Las Flores, provincia de Buenos Aires. Su primer equipo fue Juventud Unida.

Después de ser goleador en el 2008, Hernán tuvo su chance en el Torneo Argentino C, en Juventud Deportiva Las Flores. Pero volvió a su primer equipo para la temporada 2009/2010. Ahí se lució, al igual que en su paso anterior, y fue otra vez el máximo anotador del torneo.

Su buen rendimiento en el regional le valió una revancha en el Argentino C. Esta vez con los colores de Sarmiento de Ayacucho. Pese a que no pudo destacarse, al finalizar el torneo le ofrecieron irse a jugar a Guadalupe, una isla de Centroamérica, aún dependiente de Francia. Con ganas de mostrarse “en una liga más grande” agarró sin dudarlo y así emprendió viaje para sumarse a la Associaation de la Jeunesse Sportive Saintoise (AJSS).

Primeros pasos por el Nuevo Mundo

Con Lauriano Lahitte
“Llegué al club de la mano de Lauriano Lahitte, otro argentino proveniente de la Liga de Las Flores. Él está hace más de cinco años en el club, es el capitán y referente del equipo. Los dirigentes le pidieron que busque un nueve y me llamó a mí”

No fue fácil para Carballo acostumbrase al nuevo país y al cambio de idioma. Tampoco a las comidas y la lejanía de sus seres queridos: “Gracias a Dios pude traer el mate para no sentirme tan lejos de Argentina”. Lo más difícil fue adaptarse a un fútbol totalmente distinto: “Acá corren todo el partido. Son físicamente grandes y fuertes. Hay días que tenés una o dos chances de pegarle al arco. Tenés que estar siempre atento”.

Sin embargo, los hechos no le dan la razón cuando habla de las dificultades para convertir: en su debut por la copa local, la AJSS ganó 6-0 con tres goles del Tanque. Así, conquistó con velocidad el corazón de la gente: “Tengo la costumbre de salir a correr, y ahora cada vez que me reconocen salen a aplaudirme, alentarme y saludarme. Al principio me daba vergüenza, pero después corrés con más entusiasmo. Aunque no se note, te da un empujón anímico”.
 
Hace unos años atrás, Tino Costa (otro oriundo de Las Flores) también anduvo por las mismas tierras caribeñas para jugar en el Racing de Guadalupe (el Rival de la AJSS). Su buen nivel lo llevó a la Tercera división de Francia. Esto le abrió las puertas del Montpellier, con el que escalo hasta la Primera. 

Después de un año en la máxima categoría del fútbol galo se destacó y lo compró el Valencia. También fue convocado para la selección para la Selección Argentina (lo llamó Sergio Batista para los amistosos con Polonia y Nigeria en junio del 2011). 

Hernán sueña con repetir la experiencia de Tino: “Cuando uno empieza a patear la redonda quiere llegar lo más lejos posible. A veces necesitas suerte, pero hay que acompañarla con esfuerzo. Yo hago todo lo que puedo por llegar a ligas mayores. Me falta un gran paso, pero nada es imposible. Sé que hay gente que confía en mí. Ojalá llegue a un 25 por ciento de lo que hizo el Tino”.

martes, 6 de diciembre de 2011

Refuerzos con Historia XII: Los Mexicanos de Velez en el 40


A principios de 1940, Velez Sarsfield inició una gira por Centroamérica. Fueron tres meses de viaje y tan sólo se jugaron 10 partidos: 6 en México y 1 en El Salvador. La travesía se completó con tres partidos en Chile. Pero lo más destacado que trajo el Fortín de las tierras aztecas no fueron los resultados, sino un refuerzo: Luis García Cortina, alias Tití.

García era un zurdo que había enamorado al vicepresidente de Velez, Roberto Orstein, que encabezaba la delegación. Después de negociar su pase, le hicieron la revisión médica en México y lo subieron al barco para traerlo a Argentina. Fue el primer mexicano en jugar, de forma profesional, en nuestro país.

Su debut fue auspicioso. Contra Atlanta, victoria de Velez y dos goles del nuevo jugador. Para no demostrar que el primer partido no fue un espejismo, repitió la cantidad de goles a la jornada siguiente contra Racing. La fiebre azteca invadía Liniers, así que Tití aprovecho para llamar a un amigo. De esta forma llega al fortín “El pirata” Luis de la Fuente y Hoyos.

Luis de la Fuentes y Hoyos
El nuevo refuerzo venia del Atlético Corrales, de Paraguay, con mucho cartel. Había integrado el plantel de México en las eliminatorias para el Mundial de Italia 34 y era el primer mexicano que había jugado para un equipo Europeo. Vistió  la camiseta del Racing de Santander, y aunque sólo estuvo un año se dio el gusto de convertirle un gol a Ricardo Zamora.

Volviendo a Argentina, el Pirata llega a Velez de la mano de su amigo García Cortina y también debutó con dos goles. Pero no todo fue color de rosa, a poco de la llegada de su compadre, Titi se lesiona y queda marginado durante cuatro fechas del plantel. Cuando se recuperó en lo físico, el técnico ya no lo tuvo más en cuenta.

Sin lugar en el equipo y sin cobrar por los problemas económicos de Velez, García Cortina pegó la vuelta a su país. Ese viaje le cambiaria la vida: Se retiró a los 29 años para volverse piloto de avión. De la Fuente y Hoyos siguió en el plantel aunque sin su amigo en el equipo bajó mucho su nivel. Mientras tanto el resto de los jugadores mostraban su disconformidad por las diferencias entre los sueldos de mexicanos y los criollos.

Los malos manejos de la directiva, sumados a los conflictos en el plantel y un polémico partido jugado entre Atlanta (peleaba el descenso con Velez) e Independiente derivó en el final más nefasto: Velez en la B.

Terminada la temporada, El Pirata reclamó la deuda pero los dirigentes no pudieron pagarla, así De la Fuente y Hoyos volvió casi con las manos vacías a su país, donde hoy es un ídolo al que comparan con Hugo Sánchez. El estadio del Veracruz lleva su nombre.

En el Fortín dejaron un saldo de:

 Luis García Cortina: 13 partidos jugados y 7 goles. Se retiró después de su paso por Argentina.           

Luis de la Fuente y Hoyos: 16 partidos jugados y 5 goles. Volvió a México donde se destacó, más que nada, en el Veracruz. Murió en 1972 por problemas cardiacos.